¿Qué pasaría si le dieran un lápiz a un desequilibrado mental?

sábado, 28 de mayo de 2011

Movimiento sexual rotatorio de los perturbados

Cuando intentara
escuchar el mar
en sus pezones, sólo escuchó
los trenes esperando a transeúntes.
Sabía que había dado
varias ruedas de prensa,
que habían acabado con las estructuras superficiales
de las serpientes, como las moscas
desarman
los hierros de la mañana.

De las mirillas
salió gente
que buscaba firmas sin soldar,
no sólo rúbricas de saliva.
Pero las pastillas
buscaron en sus poros,
donde esconderse de las ranas
con zapatos de claqué.
Ya no había huellas dactilares
eran todo trincheras
en venta horizontal.

Sólo el cansancio
provocó un laberinto
de suspiros,
que succionaron las batas con tutú.

sábado, 21 de mayo de 2011

Discusión política

Se encontraban enfrentados los dos líderes políticos de ideologías opuestas en una enervada discusión.
- Si salgo elegido prometo recintos preparados y totalmente equipados donde los ciudadanos puedan estornudar tranquilos.
- Esta usted discriminando a la gente que no estornuda tranquila.
- El único que excluye es su partido, pues defiende sólo los que usan calzoncillos con elásticos.
- ¿Puede demostrar algo así?
- Hay fotos donde se le ve abrazando a un hombre que sale de una mercería, y efectivamente lleva calzoncillos elásticos en la mano.
-Lo abrazaba sólo porque me había dicho unas palabras muy tiernas; algo que usted y los de su partido no saben lo que es, pues en el programa electoral pone claramente que se rechaza el baile como método curativo contra la fimosis.
- ¿Y las madres? ¿Nadie piensa en esas madres que tienen a hijos enganchado a ese tipo de baile tan peligroso? Sin hablar lo molesto que son los bailarines.
- Lo que es molesto es defender a los señores con bigote, que fuman por pipa en gabardina, y llevan una rana como mascota.
- ¿No tienen derecho a vivir los señores con bigote, que fuman por pipa en gabardina, y llevan una rana como mascota?
- Después del mal estético que han hecho a la humanidad, no. No pegan con la estética de la ciudad.
- No debemos confundirlos con los señores con bigote, que fuman por pipa en frac, y llevan una rana como mascota. Meterlos a todos dentro del mismo saco sería ridículo.
- Son iguales.
- No lo son.
- Si lo son.
- Por favor, señores – se oyó de pronto una voz entre ellos que intentaba separarlos – dejen de discutir. Aquí tienen la medicación.
- ¡Pastillas!
- ¡Hay rojas, de las que a mí me gustan!
- ¿Lo dejamos en tablas?
- Por el momento lo dejamos en empate, pero empieza a asumir que yo ganaré las elecciones.
- O dejan de pelearse o me llevo las medicinas, y los encierro en sus habitaciones. – dijo la enfermera cogiendo los vasitos plástico que contenían las pastillas.

sábado, 7 de mayo de 2011

Caras de herradura en las plumas creativas

Los caminos de las algas
que intentan introducirse
por los orificios nasales,
pero que abrazan el óxido,
se cosen a las almas apiratadas.

Narices al óleo,
ojos armónicos,
labios endecasílabos
fragmentan enfrascando los rincones.

Los trozos de espejo
que flotan sobre las crines
para intentar cuartear las pupilas,
crecen entre los suspiros de mandarinas.

Narices al óleo,
ojos armónicos,
labios endecasílabos
fragmentan enfrascando los rincones.

La espiral de escamas
que va rimando con las esquinas,
sólo tiene la intención
de buscar
unas lenguas bífidas donde amamantarse
hasta morir.

Narices al óleo,
ojos armónicos,
labios endecasílabos
fragmentan enfrascando los rincones.