¿Qué pasaría si le dieran un lápiz a un desequilibrado mental?

sábado, 15 de octubre de 2016

Algunos errores de aquella carta de ajuste.


Recurrí a un ritual ancestral que consistía en descolgar los cuadros, pero mediante el caldo invoqué a una figura semihumana. Ésta me susurró al oído con su hocico puntiagudo que me lo merecía.
«No habrá pastillas para la tos simulada, ni supositorios para curar los dedos que se cayeron.»
Era un dios antropófago.
Ignoré sus susurros y me gritó en la cara que el despiste provocó la muerte por tumefacción.
Era un dios miomorfo.
Se escondía en las chaquetas y las convencía de que no había salvación. En aquella partitura seca cambió las corcheas por las fotos de mi muerte.
Era él disfrazado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario